viernes, 30 de octubre de 2009

TRAS LA MUERTE ...

Tras la muerte, al menos para los cristianos, y no solo para nosotros, viene la vida.

Y así, sucede con nuestras fiestas. primero celebramos el día de los difuntos y Noviembre sera un mes de recuerdos, tristeza y melancolía.

Mes dedicado a recuperar la memoria de aquellos que ya no están pero que nunca se fueron.
Este sera un mes de velas, flores, oraciones, recuerdos...
Aunque también habrá lugar para la fiesta, sobre todo para los mas jóvenes.

Luego vendrá Diciembre y celebraremos la vida, el nacimiento de nuestro dios y del nuevo año.

Es este por el contrario un mes especialmente festivo. Todo es alegría y jubilo.
Habrá fiesta con la familia y amigos, banquetes, baile y cante. Pero aunque reine la alegría y la celebración, también habrá un lugar para el recuerdo y la añoranza.

En definitiva, es igual, pero no lo mismo estos dos meses son como "la carne con tomates y los tomates con carne". Es decir tienen los mismos ingredientes pero en distinta proporción.

Además esta proporción va cambiando poco a poco. Cuando llega Noviembre (mes de difuntos) nos volvemos triste y nos invade el recuerdo, pero poco a poco nos va cambiando el carácter, los Huesos de Santo y las peladillas van dejando hueco a los mazapanes y polvorones, los salmos y misereres son sustituidos por los villancicos, los faroles fúnebres por velas de pascua....

...En fin, todo cambia, y vuelve la alegría y las ganas de juerga, lo único que no se va son los recuerdos y el amor por los nuestro, que, aunque ya no estén, siempre seguirán ahí.